Hoy sigo tomando fotos con el mismo esmero con el lo hice esa primera vez, en mi viaje escolar, para que mi papá se sintiera orgulloso de su pequeña fotógrafa.
Soy prof de francés en la escuela, soy fotógrafa todo el tiempo. Es mi forma de ver la vida, encuadrando, reencuadrando y editando lo que me hace feliz.
Y cada vez que tomo una foto de mi hija siento que revivo con ella el cariño que compartimos con mi papá Luis.